INFORME SEMANAL 27 DE ENERO

EDITORIAL SV
Luego de dos meses consecutivos en los que las reservas internacionales registraron una leve caída, el Gobierno apuesta a cerrar un acuerdo con el FMI que implique un mayor endeudamiento, con el objetivo de disponer de un “seguro cambiario” en este año electoral.
Para SURAMERICANA VISIÓN, el escenario más probable en el contexto geopolítico actual es que habrá un acuerdo con nuevo financiamiento y que el Gobierno no modificará su política cambiaria, manteniendo el cepo.
Desde el FMI, es posible que se argumente que el programa permitirá fortalecer las reservas internacionales a efectos de “apoyar los esfuerzos del gobierno argentino para relajar las restricciones cambiarias”, aún si, a la fecha del acuerdo, ello no ocurre. Sin embargo, dicha justificación resulta incongruente. Si las reservas adicionales provenientes del nuevo endeudamiento externo no pueden utilizarse, su impacto en las expectativas cambiarias sería irrelevante.
En cambio, si sí pueden usarse, sus posibles destinos serían:
(i) venderlas en el mercado cambiario en caso de ser necesario para sostener la política cambiaria en un contexto de apreciación real creciente; y/o (ii) utilizarlas para hacer frente a vencimientos de deuda en moneda extranjera con otros acreedores, en caso de que un shock a la balanza cambiaria impida al gobierno contar con recursos propios para ello.
Esto es similar a lo que hizo el gobierno de Mauricio Macri con la deuda del FMI entre 2018 y 2019.
Cabe recordar que la Ley de Fortalecimiento de la Sostenibilidad de la Deuda Pública (Ley 27.612), sancionada en 2021, exige que cualquier acuerdo con el FMI sea aprobado por el Congreso Nacional.
Por otra parte, la reducción de la tasa decidida por el BCRA estuvo en línea con lo esperado y es consistente con los objetivos de mejora del resultado fiscal y caída de la inflación. Esta medida, junto a la próxima baja del crawl, amplía la brecha para el carry trade e incrementa los riesgos cambiarios futuros.